Cartas jamás enviadas.

                                                                                                          A Cecilia Gotusso

 19 de Enero de 1991:

                                   Fue el último día que te he visto. Mi corazón se sintió cautivo, vació, encerrado en una prisión con la puerta abierta pero negándose a salir. Fue un gran shock para mí, el escuchar esas malditas cinco palabras, como borrarlas de mi mente: “Me voy, yo te buscaré”. Es mentira se que es una cordialidad decir eso. Sentí ese abrazo que fue el más corto de la historia, porque no te volvería a ver.

            No entiendo como se te cruzó por la mente irte abandonar todo, sin ninguna explicación, sin que te importase, sin pena y sin gloria. Sin que lo supieras, ni tampoco lo demostré, yo sufría por dentro, me desmoronaba, sentía que era mejor morirse, que venga mandinga en persona y me llevase consigo. Pero mi actitud frente a ti fue la más indiferente, te demostré que no me dolía tanto como podías llegar a pensar, sólo un par de lágrimas, un abrazo y un adiós.

            Hoy mediante esta carta, si es que un día me animare a enviarla, te enterarás que sufrí muchísimo ese maldito, Maldito, ¡¡¡MAL- DITO!!! Día. Ojala lo borre de mi mente o lo quitare de todos los calendarios de la casa para no recordarte.

            No se como finalizar una carta, es más, con mi corta edad creo que es la primera que escribo en mi vida, si las de Papá Noel no cuentan ¿Te acordas de lo que le enviábamos, las cosas que pedíamos?  Mamá siempre decía que era difícil que los duendes puedan fabricar eso y, menos que lo puedan subir  al trineo que era muy pesado para llevar. Y cuando pedíamos algo extremadamente costoso, decía que no habíamos sido buenas niñas que nos traería como mucho un trozo de carbón. Creo que me fui por las ramas, tendré que volver a la carta finalizándola.

PD: Espero verte pronto nuevamente. No sabes cuanta falta me haces, necesito verte, contarte cosas por más tontas que sean pero quiero verte y hablar.

 02 de Febrero de 1991:

                                   Mi tristeza esta siendo demasiado grande, la casa esta tan vacía sin vos. Se re extrañan tus gritos, el que digas buenas noches o que estés tres horas bañándote, te queremos en casa, nos marcaste mucho.         

            Se que estas en un buen lugar y también te quieren, porque todos siempre te quieren, tenés un gran corazón. Mientras tanto, yo decidí esperar, confiando en tu palabra esperanzadora que volverías para verme. Así es que te recuerdo en cada amigo que teníamos, en las canciones que escuchabas, los libros que leías, recordando los momentos compartidos, buenos o malos, se que hubo mucho mas buenos pero los otros también los recuerdo porque me ayudaron a madurar, o  vos me brindabas un consejo para resolverlo, en las personas y lugares que frecuentábamos y quedaron en nuestra memoria. En nuestras salidas, a la plaza, esas caminatas eternas, al cine, aunque a mi no me gustaba mucho ir pero quería estar contigo. Por último y más importante nuestras desveladas mateando, hasta casi la hora que los diarieros salen a repartir, contándonos nuestros más íntimos secretos o hablar solo de lo que nos pasó en la semana.

            En resumen sólo quería saber como estabas y como te trata tu nueva vida. Porque escribí más de lo que debía, que no era la idea original. Ya tendrás mas noticias de mí.

14 de Febrero 1991:

                                   Ya es la tercer carta que te envió y todavía no se como se empiezan, algún día aprenderé. Según dicen este es el día de los enamorados, pero no se porque, es por ese que se mató en nombre del amor y después santificaron, es muy raro eso. Siendo este día muy especial y vos mi gran amor decido escribirte para que sepas que todos los días, minutos, segundo, milésimas de segundo que pasan pienso en lo sola que quede. No es un reproche, sólo un recordatorio.

            La gente que solíamos frecuentar, trata de animarme y darme esperanzas diciendo que confié en lo que me dijiste, que ibas a volver a buscarme. Les agradezco mucho eso, hay mucha gente que me apoya, que me alienta a seguir, inclusive desde “allá arriba”, porque se que el mundo de los sentimientos, llega mas allá de lo que uno cree.

            Bueno con esto te quería contar que no es lindo este día, porque no estas a mi lado y no tengo nadie con quien pasarlo, nadie que realmente valga la pena. ¿Vos pensas también que estoy fea?¿Que nadie me puede querer así? No se que debo hacer para atraerlos, necesito tus consejos de belleza y estética y los tips de sensualidad. Ya se que con una mirada nos entendíamos pero extraño esa dulce vos chillona, que me decía que ropa me quedaba mejor, donde salir y que hacer en ciertas circunstancias, eras mi ángel, mi compañía, mi todo.

01 de Marzo de 1991:

                                   Nuevamente te vuelvo a escribir. Te cuento que estoy yendo al psicólogo, que me siento mejor. Conocí a una persona muy especial, no porque me guste sino que me esta alivianando el camino. Yo cuando partiste me había retro traído demasiado, incluso no salía de casa para quedarme a llorar sola en el cuarto, pero gracias a él ya empecé a salir a adelante y me relaciono con personas más de mi edad.

            Cada mañana que me levanto y no te veo en el cuarto, pienso y pienso en vos, me haces mucha falta, él me alegra las tardes es súper divertido e interesante, incluso escribe como lo hacías vos, ojala lo conozcas pronto. Aunque no lograr suplir ese vació, te llevas mi vida entera. Tu estilo de irte no me agrado en lo mínimo, ya le conté todo a él, también le pareció muy raro todo. Mientras me esta dando consejo de distintas cosas, la psicóloga también dice que me ayuda muchísimo su presencia en mi vida.

            Caminamos con él, las mismas calles (porque no me habré mudado para no recordar tanto) la misma plaza, ¿te acordás de nuestro árbol preferido? Por un instante me pensé en que te agradaría saber que estoy mejorando, ya que en las anteriores estaba en un pozo depresivo. Pero creo que no es la muerte de nadie, vos debes seguir adelante con tu camino y yo debería hacer lo mismo. Por semanas no podía reconocer eso pero ya estoy mejor realmente.

19 de Marzo 1991:

                                   Hace dos meses que te fuiste, recuerdo aquella tarde como si fuera ayer, intento disimular una hermosa sonrisa falsa, pero todos ven que perdí el brillo en los ojos, que ando desganada, en fin no ven más que lo que siento por dentro, en realidad creo que no tengo nada adentro, ningún órgano nada, porque me siento la persona más vacía. Pero gracias a  mi amigo logró olvidarme de eso por buen tiempo, pero la noche es larga y triste, porque uno esta sólo y la cabeza empieza a funcionar y piensa muchas cosas y me amargo, por lo tanto no voy a seguir contándote.

            Se que en esta etapa nueva de tu vida, debes estar pasándola re bien, en un lugar hermoso con el amor de tu vida. Sos feliz y me pongo feliz por saber eso, aunque no lo demuestre, me alegro de tu felicidad y progreso.

19 de abril de 1991:

           

                                   ¿Cómo estas? Yo por suerte estoy re bien, perdona que me olvidara de escribirte. Lo que pasa es que estoy bien ahora y más despejada, por la Facu., los cursos, sigo son porcelana, me va re bien me encargan un monton de trabajos, es re emocionante, si puedo me largaré a enseñar también, ya que mi amigo dice que soy re buena haciendo muñequitos, ojala también lo sea para enseñar, hay que tener más paciencia ahí. Como veras al igual que vos, decidí seguir adelante y construir mis propios sueños y alcanzar las metas que me proponga.

            A parte de compartir con mis amistades, que también, gracias a él me estoy relacionando con gente de mi edad y la verdad la paso muy bien. De vez en cuando le hace bien, una simple palabra o compañía, una caricia al alma.

            Desde el momento en que decidiste marcharte de aquí, tuve momentos buenos y malos, como todos solemos tener. Solo que algunos sabemos sacar lo positivo a cada situación, lo bueno es positivo totalmente, pero a lo malo hay que encontrarle lo bueno, que es que si reflexionas sobre ello, vas a saber como prepararte para la próxima vez que suceda algo similar y no tropezar con la misma piedra.

            Si algún día perdés el rumbo y no sabes que hacer con tu vida, recordá estas simples palabras que escribí pensando en vos: “Te amo y siempre voy a esperar tu regreso”.

PD₁: Espero que en cuatro días te acuerdes que cumplo años, espero aunque sea algo tuyo. Sea lo que sea.

PD₂: A pesar que no quise enviar las cartas nunca, me di cuenta que nunca enviaste tu dirección, ni ningún lugar donde pudiéramos ubicarte. Ya enviares las cartas de a poco, cuando tenga el coraje de hacerlo

------------------------------------------------------------------------------------------------

                                                                                    22 de Enero 1991

                               

                                   Hola, ¿Cómo estás tanto tiempo mi vida? Quería contarte que estoy demasiado dolida por haberte dejado así, sin nada, poco más y no te dije ni hasta luego, porque adiós sería como si  nunca más te vería pero yo te dije que te buscaré, ni bien pueda. Se que te va a ser muy difícil creerme, en las novelas que mirábamos juntas siempre decían eso como para salir del paso, pero no es una novela esto, es la vida real y pase lo que pase voy a  estar con vos.

            Estoy segura que piensan todos que estoy re loca en haberme ido a un lugar tan lejano y desconocido, pero la verdad que es fascinante, si llegaras a estar acá te enamorarías tanto como yo del paisaje, nada que ver a la ciudad, es hermoso realmente. Ni bien pueda te enviaré los pasajes para que puedas venir, por lo pronto te adjuntaré unas fotos del lugar y otras mías, pero créeme estoy bien y espero que vos no estés sufriendo mucho, porque se que lo vas a  estar haciendo pero bueno ya lo escribí. Ojala te animes algún día a mandarme una carta. Yo por lo pronto no se cuando me decidiré a enviarla, además dicen que el cartero pasa una vez por semana.

            Desde ya te mando millones de abrazos y besos y muchas cosquillitas que tanto te gustaba que te hiciera. Saludos a todos por allá que los quiero y extraño tanto.

           

                                                                                     05 de Febrero 1991

                      

                                   Hola mi vida, no sabes como te extraño. A pesar que este con otra persona que ame mucho, no dejo de pensar en vos y en lo que te necesito, contarte todo lo que me sucede y escuchar tus consejos. Que nos desvelemos tomando mate riéndonos de pavadas. Todas esas cosas se re extrañan, pero creo que ya es hora de crecer y formar nuestra propia vida y fue por el destino que yo haya tenido que venir a parar tan lejos, a un lugar que nunca pensé que conocería. En fin uno no sabe lo que le depara el destino, yo por suerte lo acepté y estoy al lado de mi amor, aunque confieso que mi corazón nunca se fue de tu lado.

            Por las tardes extraño salir a  caminar a tu lado, ir a  ver a los chicos, molestarme mientras intentaba pensar para escribir algo, que nunca leías porque odias leer y lo mío menos porque te re aburría. Ahora tengo un montón de tiempo para mí, igualmente tengo que aprender como crear un hogar, por ahora me la rebusco bastante.

            Te quería pedir por favor que le des muchos abrazos y besos a todos de mi parte, se que vos no vas a poder con vos misma pero quiero que a todos les llegue mis afectos. No voy a decir que me siento muy sola, solamente me falta su compañía. Próximamente les volveré a escribir.

PD: Se acerca el Día de los Enamorados va a ser el primero que no pasemos juntas, ¿con quien estarás esta vez? No me reemplaces por favor

           

                                                                                 16 de Febrero 1991

          

                                   Ya pasó el Día de los Enamorados, te cuento que yo la pase muy bien, fui al cine y después a comer a la luz de las velas, re romántico, como decíamos que queríamos que fuera nuestra cita ideal, por suerte a mi se me cumplió, ¿Cómo la pasaste vos mi reina hermosa, divina? Seguro debes tener una cola inmensa de candidatos, tocando el timbre de casa.

            Me imagino que estas aplicando todos los consejos y tácticas de seducción que te enseñe, aunque mucha bola no me dabas cuando te explicaba, ya que decías que estabas bien sola, antes que tener una mala compañía.

            Estoy re ansiosa por conseguir un buen trabajo y poder pagarte el pasaje para que vengas a mi lado, te va a fascinar la gente, el ambiente. Otra vez lo digo pero nada que ver es la gente acá, no necesitamos ni cerrar con llave las puertas, no se ni para que existen. Bueno era chiste, es para privacidad y nada mas, sino seríamos como gitanos poniendo sabanas en vez de puertas, te imaginas que cómico sería verme así, encima que ahora uso un monton de anillos y cadenitas.

            Bueno mi sol próximamente te volveré a  escribir y te daré nuevas noticias.

                                                                                    05 de Marzo 1991

                                                                                 

                                   Mi amor ¿en que andarás? Espero que te encuentres mucho mejor de lo que sentí que te estaba pasando últimamente. ¿Habrás conocido a alguien que te esta ayudando en tu vida? Si es así me re alegro de todo corazón, ojala que te cuide como yo no estoy pudiendo, ya que tenés un corazón muy frágil y vulnerable para este mundo tan agresivo. Espero que algún día me des detalles de él y como fue que llego a tu vida. Me pone contenta que estés mejorando, quiero que sigas sonriéndole al mundo como lo hacías antes, no quiero nada de eso que estas mal. Ni que te hagas problema por cosas que no valen la pena.

                                                                                                           

                                                                                       22 de Marzo de 1991

                                                                                             

                                   ¡Uy! Que de recuerdos me vienen, hace dos meses que te solté los bracitos y la carita húmeda, de tanto llorar, dicientote que me iba sin darte explicaciones, pero el amor es así de loco, ¿Conoces la famosa fábula del amor y la locura que estaban en el Olimpo jugando, no? Si no la conoces haceme el favor de buscarla es realmente muy linda.

            Espero que no estés mal y que este amigo tuyo te logre sacar adelante, que salgan mucho a pasear y sean felices, necesitas una buena persona, como vos, a tu lado. No la pierdas, es muy lindo tener una amistad realmente sana.

            También te quiero decir que en esta etapa de mi vida me estoy proponiendo nuevas metas, como la de formar una familia, casarme de Blanco, que era tan importante para nosotras. Me gustaría que vinieses para ese Gran Día,  no se cuando va a pasar, es solo un proyecto, espero tener trabajo y la plata para que vengan todos. Espero que te pongas feliz por mí.

                                                                                     20 de Abril de 1991

         

                                   Hola, ¿en que andas que te olvidas de escribirme? Demasiado ocupada se ve que debes andar muy ocupada. Yo a veces también lo estoy y me cuesta sentarme a  escribir, porque cocino, plancho, lavo, etc… y bueno cuando me queda tiempo a la noche, pongo la pava y me pongo a escribir unas líneas, no serán de lo mas importante, pero me salen del corazón.

Sabes que me arrepiento de no haberte dicho que me enseñaras a trabajar con la porcelana, acá tiene un monton de salida, también hay muchas señoras que trabajan re bien, pero me da cosita pedirles que me enseñen. En fin si estuvieras acá, sabes lo bien que te iría.

Se acerca tu cumple preciosa, seguramente vas a estar  re ocupada con tus amigos, espero poder darte no el mejor de los regalos pero algo que te ponga muy contenta y te vuelva el brillo a esos hermosos ojos.

            ¡Ah! Casi me olvidaba, se que no te di mi dirección, ni nada como pudieras ubicarme, pero recuerdo aún ese día de despedida que te dije bien claro “Me voy, yo te buscaré”, no fue de mala, sino porque realmente quería ver cuanto confiabas en mí.

PD1: ¡Que te vaya muy hermoso en todo lo que te propongas!

PD2: ¡Que pases un  hermoso, hermoso cumpleaños! Me apena no poder estar ahí con vos, festejando y comiendo todo lo rico que haces siempre que hay una fiesta.

                        El 23 de Abril, llega el cartero, que habitualmente trae facturas no más que eso, pero en este día. Llego un sobre rosa con flores que decía: “Para vos que cumplís años hoy, muy importante que lo leas sola”. Llena de misterio, se dirigió a su cuarto y pensaba y pensaba si abrirlo o no, finalmente lo abrió con mucho cuidado para no romper el hermoso sobre, aunque no conocía la letra que puso los datos para que llegue a destino y menos conocía el destinatario. Vio montones de fotos, viejas en las que estaba con ella y actuales en su nuevo hogar. Abrió un poco más y empezaron a caer un montón de cartas, que empezó a leer atentamente y si era ella, se había acordado que estaba esperándola, desde aquel día en que se fue, que no dijo nada. Volvió a releer las cartas y notó algo extraño en ellas. Inmediatamente busco las suyas que tenía muy bien guardadas en un cajón y, las colocó en orden cronológico y precisamente una era respuesta de la otra, increíble la conexión que se establecía entre ellas. A lo que suena el teléfono, y no lo atendió quedando atónita de ese descubrimiento, a lo que gritan: “vení corriendo, que es ella”. Ese fue el mejor de los mejores cumpleaños y regalos que uno puede tener.




©Marcos A. Robledo 2012