Sueños

                      

Esta es la historia de mis sueños frustrados. Siempre quise estar en esa pequeña caja, nunca hice caso a: “Tenés que estudiar, tener una carrera, un título porque con lo que hacía no iba a llegar lejos, se necesita tener contactos.” Yo a esto les decía nah que carrera ni ocho cuartos, yo quiero seguir siendo bohemio y mientras tenga mi rama para fumar cuando quiera y tenga ganas, me quedo tranquilo con esta vida. Además de que contacto me hablan si con el talento que tengo puedo hacer lo que se me plazca.

Entonces fue así que adicioné y adicioné pero no lograba concretar mi sueño y empecé a creer que era verdad lo del contacto, yo solo me relacionaba con mis amigos, no con nadie que me pudiera hacer una clase de gancho en ese mundo. De todos los que nos juntábamos a la salida del colegio, “El Rubio” esta donde siempre quiso estar, esta bien que el gil estuvo sus largos años estudiando, no disfruto de nada, banda de veces nos canceló sobre el pucho. En cambio yo, yo me las viví todas en grande y hago lo que me gusta y cuando me da la gana hacer algo.

            Finalmente me llamaron para un casting en una agencia, necesitaban un empleado. Hoy en día soy el encargado de  la limpieza en un conocido canal de Tv y aún sigo mirando desde afuera pero estoy en la fábrica de sueños...





©Marcos A. Robledo  2013